viernes, 13 de noviembre de 2009

FIESTA - FIESTA



Parece que llegó el momento que muchos y muchas estaban esperando (vos también, no te hagas el gil), la justicia habilitó el primer casamiento Gay en nuestro país. Claro que muchos de los que están casados hace años estarán diciendo ¿pelear para casarse?, ¿están en pedo?. Pero el humano es así quiere todo lo que a otro se le da y a uno se le niega. Respecto a este tema la gente está completamente dividida por un lado están los que celebran esta medida y por el otro los que piensan que el Apocalipsis está cada vez mas cerca. Nosotros en función del rigor periodístico y por una lesión cerebral que nos produjo ver tantos programas de Mauro Viale, juntamos ambas posturas a favor y en contra en 3 sencillas preguntas.
1) El fallo de los jueces dice que la ley debe tratar a cada uno con igual respeto en función de sus singularidades, sin necesidad de entenderlas o regularlas, ¿usted comparte esa visión?
A favor: absolutamente, las singularidades componen la esencia de una sociedad tanto como lo que nos une. el mundo es maravilloso porque es multicolor.
En contra: ni empecé y ya tengo el estómago revuelto, cuando dice "sin necesidad de entenderlas" está bien, pero ¿sin necesidad de regularlas?, mañana llega un hombre con la "singularidad" de amar a su cabra y los tenemos que casar también, déjense de joder!

2) ¿De que forma afecta esto a su vida diaria?
A favor: de manera absolutamente positiva, es doloroso cuando desde el propio estado se le niegan posibilidades de igualdad a una persona por ser gay, me siento mas Argentino que nunca, y desde ya si en algún momento decido casarme lo haré.
En contra: en nada salvo el asco que me dan estos maracas, pero en nada de nada me afecta, mi vida sigue igual no conozco a ninguno de estos, una vez tuve un amigo judío creo, pero de estos a ninguno.

3) Muchos cuestionan la necesidad de este planteo, ya que desde hace un tiempo existía la unión civil.
A favor: lo importante es llamar a las cosas por su nombre, cuando uno se recibe de médico no quiere que por ser gay le den el título de "pasó por la universidad" sino de doctor, cuando uno quiere casarse quiere casarse, con todo lo que eso significa.
En contra: tiene razón llamemos a las cosas por su nombre: Puto! en el barrio los cagábamos a trompadas a estos tipos, porque era un barrio decente, siempre jugábamos a la pelota con Cavallo y Barrionuevo que eran mis vecinos...¡qué tiempos aquellos, cuánta dignidad!

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